En la localidad de Ponzano, próxima a Barbastro, capital del Somontano en Huesca, se encuentra la bodega más antigua de España en funcionamiento.
Los vestigios de estas bodegas subterráneas se remontan nada más y nada menos que al año 1480. La bodega Osca está asentada sobre la casa y bodega del último inquisidor español. También conserva restos del siglo XIX.
En la actualidad Bodegas Osca están abiertas a todo aquel que quiera descubrir esta amalgama de esencias a barrica, cuero, hollejo y piedra desde el mismo suelo de una bodega familiar, de pequeña producción, donde el que entra podrá conocer en primer persona este pequeño trozo de historia.
Un pequeña bodega con una limitada producción de 1.500 hectólitros anuales, cuidados celosamente y de forma absolutamente artesanal en pequeños depósitos y criados en 360 barricas de roble francés y americano que duermen
al abrigo de cientos de años historia.